La tendencia de transformar fotos al estilo Ghibli y los graves riesgos que implica

Jefe de la Unidad de Ciberdelitos de la Policía advierte que estas prácticas podrían incluso permitir el acceso no autorizado a cuentas bancarias

En los últimos días, una tendencia viral ha conquistado las redes sociales: la transformación de fotos históricas, escenas de películas y memes en ilustraciones con el inconfundible estilo visual de Studio Ghibli.

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Esta moda, impulsada por herramientas de inteligencia artificial, permite convertir imágenes reales en caricaturas detalladas, simulando la estética del famoso estudio de animación japonés. Sin embargo, detrás de esta aparente diversión, existen riesgos importantes que los usuarios deben considerar antes de compartir sus fotografías.

Gonzalo García, jefe de la Unidad Nacional de Ciberdelitos de la Policía Nacional del Ecuador, advierte que aunque convertirnos en un personaje de Ghibli puede parecer divertido, también implica riesgos significativos.

¿Cuáles son los peligros de esta tendencia?

1. Pérdida de control sobre nuestras imágenes

Al subir nuestras fotos a estas aplicaciones, las estamos entregando a una empresa privada sin conocer con certeza cómo serán utilizadas. Al aceptar los términos y condiciones—que muchas veces no leemos—cedemos ciertos derechos sobre nuestras imágenes. Esto significa que la compañía puede:

• Almacenarlas por tiempo indefinido.

• Modificarlas y reutilizarlas en otros productos o servicios.

• Compartirlas con terceros o incluso venderlas a empresas de publicidad.

Además, una vez que enviamos nuestras fotos a una plataforma de terceros, perdemos el control sobre ellas. Es importante preguntarnos: ¿Dónde quedan almacenadas? ¿Por cuánto tiempo? ¿Podrán ser usadas para fines comerciales o de reconocimiento facial?

2. Nuestro rostro es un dato biométrico único

No debemos olvidar que nuestro rostro no es solo una imagen, sino un dato biométrico, tan único e irrepetible como nuestras huellas dactilares.

Muchas plataformas digitales utilizan el reconocimiento facial como método de verificación de identidad. Si una empresa malintencionada accede a nuestra fotografía, podría:

•  Crear perfiles falsos en redes sociales.

• Suplantar nuestra identidad en servicios digitales.

• Acceder a cuentas bancarias o plataformas gubernamentales que requieran verificación facial.

"Estamos entregando nuestra identidad digital a una empresa sin saber con certeza cuál será su finalidad ni cómo la utilizará. No se trata de satanizar la inteligencia artificial, sino de aprender a usarla de manera segura e informada."
Gonzalo García,
jefe de la Unidad Nacional de Ciberdelitos de la Policía

3. Falta de lectura de términos y condiciones

Uno de los problemas más comunes es que la mayoría de los usuarios no lee los términos y condiciones de las aplicaciones que utiliza. Muchas de estas herramientas incluyen cláusulas que les permiten almacenar y procesar nuestras fotos con fines comerciales sin que nos demos cuenta.

Aceptar estas condiciones sin leerlas puede permitirles:

• Almacenar nuestras imágenes por tiempo indefinido.

• Editarlas o utilizarlas en otros productos.

• Compartirlas con terceros o venderlas a otras empresas.

4. Creación de perfiles falsos y videos manipulados

Otra gran preocupación es la posibilidad de que nuestras fotos sean utilizadas para crear perfiles falsos en redes sociales o, peor aún, para generar deepfakes.

Los deepfakes son videos manipulados con inteligencia artificial que pueden hacernos parecer decir o hacer cosas que nunca ocurrieron. Este tipo de tecnología ya ha sido usada en campañas de desinformación y estafas.

5. Exposición innecesaria en redes sociales

Publicar información personal constantemente puede ponernos en riesgo. Compartir imágenes con detalles como:

• Ubicación (por ejemplo, en tiempo real).

• Placas de vehículos.

• Uniformes escolares de nuestros hijos.

• Planes de viaje o vacaciones.

Toda esta información puede ser aprovechada por delincuentes para cometer fraudes, robos o suplantación de identidad.

¿Cómo proteger nuestra privacidad?

• Leer los términos y condiciones antes de usar cualquier aplicación de edición de imágenes.

• Investigar la aplicación para conocer dónde almacena los datos y qué uso les dará.

• Evitar exponer a menores de edad, protegiendo su imagen y privacidad en internet.

• Ser conscientes de lo que publicamos en redes sociales, evitando compartir información sensible que pueda ser utilizada con fines malintencionados.

Fuente:  Extra.ec